Fotografía cortesía
Adriana Vásquez
Peter Derrek Hof, embajador del Reino de los Países Bajos, realizó una gira de tres días en El Salvador, preocupado por la situación de violencia que enfrentan niñas y mujeres salvadoreñas. Esto bajo el marco de la “Embajada Móvil El Salvador”. Su agenda contempló su participación en dos conversatorios, entrevistas a medios; y su visita al Centro de Readaptación para Mujeres de Ilopango.
Hof, preocupado por las consecuencias que trae la penalización absoluta del aborto, visitó, el 16 de octubre, a las mujeres que experimentaron partos extrahospitalarios o emergencias obstétricas; y, por ello fueron procesadas y condenadas por homicidio agravado en los no nacidos. “Fue una visita muy emotiva, escuchar la historia de estas mujeres que tienen condenas de 30 años o más, es algo injusto para nosotros es difícil entender porque esas mujeres están en la cárcel”, lamentó.
El diplomático también se reunió con las abogadas de la Agrupación ciudadana por la despenalización del aborto para conocer mejor la labor que realizan en pro de la defensa de los derechos de estas mujeres, encarceladas injustamente, de acuerdo con estas profesionales. Así como para tener información de primera mano sobre los avances en la solicitud de reforma al artículo 133 del Código Penal para despenalizar el aborto cuando la vida y salud de las embarazadas esté en riesgo, cuando el embarazo sea producto de violencia sexual y cuando la vida del feto sea inviable fuera del útero.
Después de la visita, Hof publicó en su cuenta de Twitter: “Quedé impactado de oír las historias de injusticia de 12 mujeres en la cárcel Ilopango, con condenas de 30 años por aborto. Urgimos a El Salvador a respetar los #DDHH de mujeres, a no encarcelar esas mujeres, a despenalizar el aborto y a ofrecer un debido proceso en sus juicios”.
Este gesto logra visibilizar una realidad que muchas personas desconocen y que está presente: la penalización absoluta del aborto provoca que mujeres que han padecido una complicación médica sean condenadas, aseguró Sara García, de la Agrupación ciudadana. Esto podría sucederle a cualquier persona sin importar su condición física, edad o clase social, aseguró.
El embajador dijo que seguirá apoyando a la Agrupación ciudadana para que las mujeres condenadas injustamente recuperen su libertad. “Ese Código Penal está en contra de los derechos humanos; es claro que hay que cambiar la ley”, reaccionó Hof al salir del penal de Ilopango.
Además de la visita a Ilopango, el 16 de octubre participó en el conversatorio “Un futuro sin violencia para las mujeres y niñas salvadoreñas es posible” en colaboración con la Agrupación Ciudadana y el Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD). En este evento se discutieron acciones para contrarrestar las alarmantes cifras de feminicidios, violaciones, embarazos en niñas y otras formas de violencia que sufren las mujeres salvadoreñas.